jueves, 30 de abril de 2015

Principio de activación de un Sistema eléctrico en forma inalámbrica y a larga distancia


Para trabajar con la medidas de longitud con los mas pequeños.




jueves, 23 de abril de 2015

MUY Interesante.......

¡Logran imprimir una canción en 3D!

¿Cómo, se puede imprimir en 3D una canción? Sí, se puede, y del proceso sale un extraño objeto, que vuelve a convertirse en la canción que era con solo escanearlo mediante la cámara de un smartphone. Megawow.


 
La extraña propuesta de almacenamiento musical de una compañía llamada Reify es la siguiente: que una canción se solidifique y que al escanearlo vuelva a ser algo virtual. Así de espectacular como suena.
La imagen a continuación, para dar un ejemplo que se entienda, no es otra cosa que un fragmento de la archiconocida obra La Cabalgata de las Valkirias, tercer acto de la segunda ópera de Richard Wagner:

Buendiario-reify-canciones-3d-2

La idea de ReiFy no es que convirtamos toda nuestra discografía en una colección de objetos imposibles de almacenar en casa, sino ofrecernos una curiosa y novedosa manera de transformar sonidos o canciones concretas en objetos decorativos para conservar o regalar. Todo un regalo, que luego puede devolverse a su formato original, vale aclarar.

Buendiario-reify-canciones-3d-1

Reify utiliza un software que convierte las diferentes ondas de sonido de una melodía en distintos picos y salientes de una estructura tridimensional. El objeto resultante se imprime en 3D. Después basta una aplicación que utilice la cámara del smartphone para escanear el objeto en 3D y reconstruir la canción. ¿Suena simple? Aparentemente lo es, y pronto seguramente podremos experimentar estas cosas en vivo y en directo, todo un privilegio futurista.
Visto en This is Colossal

martes, 21 de abril de 2015

lunes, 20 de abril de 2015

Historia de la Robótica...

Universidad Carlos III de Madrid
 10 Modelado y simulación del robot PASIBOT. Estudio de la rigidez y mejora en la prevención del vuelco lateral. Víctor Espantoso Miranda Universidad Carlos III de Madrid 11 


1.1 Historia de la robótica


 Durante siglos el ser humano ha construido máquinas que imitan las partes del cuerpo humano. Los antiguos egipcios unieron brazos mecánicos a las estatuas de sus dioses. Los griegos construyeron estatuas que operaban con sistemas hidráulicos, los cuales se utilizaban para fascinar a los adoradores de los templos. El inicio de la robótica actual puede fijarse en la industria textil del siglo XVIII, cuando Joseph Jacquard inventa en 1801 una máquina textil programable mediante tarjetas perforadas. La revolución industrial impulsó el desarrollo de estos agentes mecánicos, entre los cuales se destacaron el torno mecánico motorizado de Babbitt (1892) y el mecanismo programable para pintar con spray de Pollard y Roselund (1939). Además de esto, durante los siglos XVII y XVIII fueron construidos en Europa muñecos mecánicos muy ingeniosos que tenían algunas características de los robots. Jacques de Vauncansos construyó varios músicos de tamaño humano a mediados del siglo XVIII. Esencialmente se trataba de robots mecánicos diseñados para un propósito específico: la diversión. En 1805, Henri Maillardert construyó una muñeca mecánica que era capaz de hacer dibujos. Una serie de levas se utilizaban como ' el programa ' para el dispositivo en el proceso de escribir y dibujar. Estas creaciones mecánicas de forma humana deben considerarse como inversiones aisladas que reflejan el genio de hombres que se anticiparon a su época[1]. La palabra robot se empleó por primera vez en 1920 en una obra de teatro llamada "R.U.R." o "Los Robots Universales de Rossum" escrita por el dramaturgo checo Karel Capek. La trama era sencilla: el hombre fabrica un robot, después el robot mata al hombre. Muchas películas han seguido mostrando a los robots como máquinas dañinas y amenazadoras. La palabra checa 'Robota' significa servidumbre o trabajador forzado, y cuando se tradujo al ingles se convirtió en el término robot. Modelado y simulación del robot PASIBOT. Estudio de la rigidez y mejora en la prevención del vuelco lateral. Víctor Espantoso Miranda Universidad Carlos III de Madrid 12 Entre los escritores de ciencia ficción, Isaac Asimov contribuyó con varias narraciones relativas a robots, que escribió a partir de 1939. A él se atribuye el acuñamiento del término Robótica. La imagen de robot que aparece en su obra es el de una máquina bien diseñada y con una seguridad garantizada que actúa de acuerdo con tres principios. Estos principios fueron denominados por Asimov las Tres Leyes de la Robótica, y son [2]: 1) Un robot no puede actuar contra un ser humano o, mediante inacción, que un ser humano sufra daños. 2) Un robot debe obedecer las ordenes dadas por los seres humanos, salvo las que entren en conflicto con la primera ley. 3) Un robot debe proteger su propia existencia, a no ser que esté en conflicto con las dos primeras leyes. Consecuentemente todos los robots de Asimov son fieles sirvientes del ser humano, de ésta forma su actitud contraviene a la de Kapek. Inicialmente, se definía un robot como un manipulador reprogramable y multifuncional diseñado para trasladar materiales, piezas, herramientas o aparatos a través de una serie de movimientos programados para llevar a cabo una variedad de tareas. El desarrollo en la tecnología, donde se incluyen las poderosas computadoras electrónicas, los actuadores de control retroalimentados, transmisión de potencia a través de engranes y la tecnología en sensores, han contribuido a flexibilizar los mecanismos autómatas para desempeñar tareas dentro de la industria. Son varios los factores que intervinieron para que se desarrollaran los primeros robots en la década de los 50. La investigación en inteligencia artificial desarrolló maneras de emular el procesamiento de información humana con computadoras electrónicas e inventó una variedad de mecanismos para probar sus teorías. Las primeras patentes aparecieron en 1946 con los muy primitivos robots para traslado de maquinaria de Devol. También en ese año aparecen las primeras computadoras: J. Presper Eckert y John Maulchy construyeron el ENAC en la Universidad de Pensilvania y la primera máquina digital de propósito general se desarrolla en el MIT. En 1954, Devol diseña el primer robot programable y acuña el termino "autómata universal", que posteriormente recorta a Unimation. Así llamaría Modelado y simulación del robot PASIBOT. Estudio de la rigidez y mejora en la prevención del vuelco lateral. Engleberger a la primera compañía de robótica. La comercialización de robots comenzaría en 1959, con el primer modelo de la Planet Corporation que estaba controlado por interruptores de fin de carrera. En 1964 se abren laboratorios de investigación en inteligencia artificial en el MIT, el SRI (Stanford Research Institute) y en la universidad de Edimburgo. Poco después los japoneses que anteriormente importaban su tecnología robótica, se sitúan como pioneros del mercado. Otros desarrollos importantes en la historia de la robótica fueron: · En 1960 se introdujo el primer robot "Unimate'', basado en la transferencia de artículos programada por Devol. Utilizaban los principios de control numérico para el control de manipulador y era un robot de transmisión hidráulica. Víctor Espantoso Miranda Universidad Carlos III de Madrid 13 Imagen 1.1.1: Robot Unimate de Devol · En 1961, un robot Unimate se instaló en la Ford Motors Company para atender una máquina de fundición de troquel. · En 1966, la firma noruega Trallfa construyó e instaló un robot de pintura por pulverización. Modelado y simulación del robot PASIBOT. Estudio de la rigidez y mejora en la prevención del vuelco lateral. · En 1971 el "Standford Arm'', un pequeño brazo de robot de accionamiento eléctrico, se desarrolló en la Standford University. Víctor Espantoso Miranda Universidad Carlos III de Madrid 14 Imagen 1.1.2: Robot “Standford Arm” · En 1973 se desarrolló en SRI el primer lenguaje de programación de robots del tipo de computadora para la investigación con la denominación WAVE. Fue seguido por el lenguaje AL en 1974. Los dos lenguajes se desarrollaron posteriormente en el lenguaje VAL comercial para Unimation por Víctor Scheinman y Bruce Simano. · En 1978 se introdujo el robot PUMA (Programmable Universal Machine for Assambly) para tareas de montaje por Unimation, basándose en diseños obtenidos en un estudio de la General Motors. · En 1980 un sistema robótico de captación de recipientes fue objeto de demostración en la Universidad de Rhode Island. Con el empleo de visión de máquina el sistema era capaz de captar piezas en orientaciones aleatorias y posiciones fuera de un recipiente[2]. Modelado y simulación del robot PASIBOT. Estudio de la rigidez y mejora en la prevención del vuelco lateral. Actualmente, el concepto de robótica ha evolucionado hacia los sistemas móviles autónomos, que son aquellos capaces de desenvolverse por sí mismos en entornos desconocidos y parcialmente cambiantes sin necesidad de supervisión. El primer robot móvil de la historia, pese a sus muy limitadas capacidades, fue ELSIE (Electro-Light-Sensitive Internal-External), construido en Inglaterra en 1953. ELSIE se limitaba a seguir una fuente de luz utilizando un sistema mecánico realimentado sin incorporar inteligencia adicional. En 1968 apareció SHACKEY del SRI (standford Research Institute), que estaba provisto de una diversidad de sensores así como una cámara de visión y sensores táctiles y podía desplazarse por el suelo. El proceso se llevaba en dos computadores conectados por radio, uno a bordo. En los setenta, la NASA inicio un programa de cooperación con el Jet Propulsión Laboratory para desarrollar plataformas capaces de explorar terrenos hostiles. El primer fruto de esta alianza seria el MARS-ROVER, que estaba equipado con un brazo mecánico tipo STANFORD, un dispositivo telemétrico láser, cámaras estéreo y sensores de proximidad. Imagen 1.1.3: Plataforma exploradora En los ochenta aparece el CART del SRI que trabaja con procesado de imagen estéreo, más una cámara adicional acoplada en su parte superior. También en la década de los ochenta, el CMU-ROVER de la Universidad Carnegie Mellon incorporaba por primera vez una rueda timón, lo que permite cualquier posición y orientación del plano. Víctor Espantoso Miranda Universidad Carlos III de Madrid 15 Modelado y simulación del robot PASIBOT. Estudio de la rigidez y mejora en la prevención del vuelco lateral. En el campo de los androides cabe mencionar el P3 de Honda que mide 1,60 m, pesa 130 Kg y es capaz de subir y bajar escaleras, abrir puertas, pulsar interruptores y empujar vehículos. Imagen 1.1.4: Robot P3 de Honda En general la historia de la robótica puede ser clasificada en cinco generaciones (división hecha por Michael Cancel, director del Centro de Aplicaciones Robóticas de Science Application Inc. En 1984). Las dos primeras, ya alcanzadas en los ochenta, se centraron en la gestión de tareas repetitivas con autonomía muy limitada. La tercera generación impulsó la visión artificial, en lo cual se ha avanzado mucho en los ochenta y noventa. La cuarta incluye movilidad avanzada en exteriores e interiores y la quinta entraría en el dominio de la inteligencia artificial en lo cual se esta trabajando actualmente.


sábado, 18 de abril de 2015

Material extraído http://www.scielo.org.ar/scielo.php?pid=S1850-00132012000100007&script=sci_arttext

DOSSIER-ARTÍCULOS
Breve repaso histórico de la computación hogareña en la Argentina
Guido de Caso*


El presente trabajo tiene por objetivo realizar un breve repaso histórico acerca del proceso de nacimiento y desarrollo de la computación hogareña en la Argentina. Por "computación hogareña" se entenderá al conjunto de dispositivos digitales de propósito específico o general, diseñados para ser utilizados en el hogar y comercializados principalmente a individuos. Se analizan en estetrabajo  la aparición de los primeros dispositivos hogareños previos a las computadoras programables  modernas, tales como calculadoras y juegos de video; el surgimiento de las primeras computadoras personales programables, tales como la Commodore; la irrupción de las primeras PC de IBM; y, finalmente, el gran avance de los últimos 20 años, de la mano de Internet y la telefonía móvil.
Palabras clave: Computación personal; Historia de la tecnología; Argentina.
This work intends to briefly review the history of the birth and development of personal computing in Argentina. The term "personal computing" will be used to refer to the set of general and specific- urpouse digital devices designed to be used at home and marketed targetting individuals mainly. I analyse the arising of the first home devices prior to modern programmable computers, such as  calculators and videogames; the emergence of the first programable personal computers, such a the Commodore; the appearance of the IBM PC; and, finally, the great leap forward experienced during the last 20 years, with the growth of the Internet and the mobile devices.
 Key words: Personal computing; History of technology; Argentina.


1. Introducción
La historia de los inicios de la computación en la Argentina, y en particular el ingreso de la  computadora en el ámbito académico y científico, ha sido comentada en una serie de trabajos de análisis histórico. Existe una base de material suficiente como para comprender a grandes rasgos la dinámica de la historia de la computación entre 1960 y 1975 y su impacto en las universidades, los centros científicos y las empresas públicas y privadas. Por supuesto que dicha base no es bajo ningún punto de vista completa ni autocontenida, y personalmente considero que tal proceso histórico debería ser documentado al mayor nivel posible, sin ahorro de detalles.
Por otra parte, desde mediados de la década del 70 del siglo XX y hasta el día de hoy se ha producido un proceso de crecimiento de la computación personal u hogareña en todo el mundo. Es cierto que dicho proceso no fue continuo, sino que hubo importantes hitos que facilitaron su difusión. En particular, en la Argentina este proceso no se dio de forma pareja: en algunas regiones urbanas se produjo más rápidamente mientras que hay sectores geográficos y brechas sociales donde estas tecnologías aún no han impactado de forma directa.
Este trabajo se propone realizar un estudio sobre el proceso de aparición y consolidación de la computación personal y hogareña en la Argentina, así como un análisis de cuáles fueron las tecnologías, empresas y políticas gubernamentales que influyeron al mismo.
El resto de esta monografía se divide de la siguiente manera: en la sección 2 se realiza un repaso acerca de los primeros artículos electrónicos hogareños emparentados en mayor o menor medida con la computación; la sección 3 comenta el proceso por el cual los primeros dispositivos que realizaban computaciones propiamente dichas arriban a los hogares; la sección 4 analiza la llegada de las Personal Computers (PCs) de IBM y su impacto. Este estudio histórico concluye en la sección 5, en la cual se analiza la consolidación de la computación hogareña en la Argentina, de la mano de la baja de costos, Internet y, más recientemente, la telefonía móvil.
2. Antes de la computación personal
2.1. La radio y la televisión
El 27 de agosto de 1920 se produjo en la Argentina una de las primeras transmisiones públicas de radio en el mundo (Zigiotto, 2007). Se trataba de la ópera Parsifal de R. Wagner, la cual fue emitida desde la azotea del Teatro Coliseo. Esta difusión sólo pudo ser disfrutada por un puñado de afortunados que contaban con equipamiento de radiocomunicaciones.
Luego de esta transmisión experimental, la programación fue ampliándose y diversificándose (Merkin y Ulanovsky, 1996). A fines de la década de 1920 ya existían más de media docena de emisoras, las cuales se financiaban en base a publicidad, especialmente durante la hora de los populares radioteatros.
En definitiva, hacia 1930 ya muchos hogares contaban con receptores de radio. Este fenómeno se difundió aún más gracias a la llegada de la radio a transistores durante la década de 1950. Esta nueva tecnología permitió que los receptores de radio se redujeran en tamaño, se hicieran más confiables, menos costosos y más eficientes en cuanto a consumo energético. En definitiva, sentó las bases de la radiodifusión móvil y de acceso universal.
Fue también a comienzos de los años 50 que la televisión hizo su debut en la Argentina (Buero, 1997). El gobierno de Juan Domingo Perón veía con interés la tecnología de la televisión como una vía para difundir sus actos oficiales, además de la radio. De la mano de Jaime Yankelevich, la primera transmisión televisiva de Argentina se realizó gracias a una antena especialmente colocada en el entonces Ministerio de Obras Públicas.
Los primeros receptores, así como todo el material necesario para la grabación y difusión, eran importados desde Estados Unidos a costos prohibitivos para la gran mayoría de la población. Fue recién en 1954 que surgió la primera fábrica nacional de televisores: Copehart Argentina. Desde ese entonces, se fue dando un lento pero sostenido proceso de difusión de la televisión en los hogares argentinos. Este crecimiento de audiencia fue complementado por la aparición de nuevas emisoras a comienzos de la década de 1960.
2.2. Las calculadoras
Mientras en 1960 los televisores comenzaban lentamente a poblar los hogares argentinos y las radios portátiles eran ya artículos populares, las calculadoras electrónicas todavía tardarían casi dos décadas en llegar. Los comercios utilizaban variantes de máquinas mecánicas de sumar y cajas registradoras. Las grandes empresas contaban también con calculadoras mecánicas y contrataban el servicio de empleados para operarlas, llamados "calculadores", los cuales eran principalmente mujeres. Mientras tanto, los científicos y principalmente los estudiantes utilizaban reglas de cálculo y tablas con valores precalculados, en general de ciertas funciones de utilidad en el cálculo numérico.
Las primeras calculadoras totalmente electrónicas fueron las británicas Sumlock ANITA, las cuales aparecieron en 1961 y se comercializaban a aproximadamente 1000 dólares de aquella época. Por supuesto, estas calculadoras estaban fuera del alcance de los usuarios hogareños tales como estudiantes.
El desarrollo de este tipo de calculadoras fue avanzando a mediados de la década de 1960 con la introducción de calculadoras programables como la Olivetti Programma 101. Se diferencia a estas calculadoras programables de las computadoras porque no contaban con una instrucción de salto condicional. Sin embargo, algunos consideran estas calculadoras como las primeras computadoras de uso personal.
La aparición de las calculadoras de bolsillo se dio en Japón a comienzos de la década de 1970. La aparición del chip de bajo consumo permitió evitar los cientos de pesados transistores que se necesitaban para codificar las operaciones aritméticas. Reproduzco a continuación el testimonio del rosarino Claudio Scabuzzo: "A principios de los 70 apareció en mi casa una calculadora Casio CM-602, mini electronic calculator, made in Japan. Tenía LEDs verdes, pequeños, funciones más que básicas y usaba cuatro pilas doble AA, que duraban pocas horas, pero tenía conexión para fuente externa. Pocos años después estos equipos serían más accesibles y compactos, y se fabricarían en el país" (Scabuzzo, 2008A).
De hecho, la empresa de neumáticos Fate desarrolló a fines de los años sesenta una división electrónica en la cual se gestó la renombrada calculadora nacional Cifra. Carlos Giardino, quien integró el equipo del proyecto Cifra, recuerda: "[...] a Fate se la asociaba a cubiertas. [...] Vislumbramos un camino para introducirnos en el mercado para competir con las famosas calculadoras Logos 328, la primera calculadora electrónica de venta masiva en el mercado local. [...]. En 12 meses de desarrollo en el laboratorio y ocho de estudio de mercado se llegó al prototipo: una carcasa sobredimensionada, un teclado importado, un impresor Seiko japonés y una gran cantidad de transistores, circuitos integrados y un MOS como unidad de cálculo que fue denominada: Cifra 311" (Scabuzzo, 2008B).
Se fabricaron 1000 unidades siguiendo un primer diseño y, aplicando una cuidadosa estrategia comercial, estas calculadoras fueron diseminadas por los puntos de venta del país según la distribución nacional del PBI.
En 1971 se diseñó un segundo modelo, el cual ya tenía características de diseño y prestaciones comparables a las máquinas japonesas o norteamericanas que se estaban importando en ese entonces. Esta segunda generación de calculadoras fue exportada a Brasil y a México.
Comenta Giardino en tono de anécdota que "su calidad sorprendía y en la República Federal de Alemania le llegaron a decir al embajador Rafael Vázquez que no sólo teníamos carne de buena calidad."
También se fabricaron en el país las calculadoras de la firma Czerweny, una reconocida fábrica de motores de la ciudad de Gálvez, Santa Fe. Cuenta Scabuzzo: "[...] Desarrollaron calculadoras de mano, básicas, financieras y científicas, las primeras diseñadas en la Argentina. Eran negras o grises, con visores LED o de plasma gaseoso, utilizaban baterías de 9V o cuatro pilas AA, y tenían una tapa que cubría el teclado. Durante su años de existencia no lograron un reconocimiento del consumidor como los productos Cifra, pero eran accesibles frente al precio de otras calculadoras importadas" (Scabuzzo, 2008B).
Otra característica saliente de las calculadoras Czerweny es que fueron de las primeras calculadoras comercializadas en el país que utilizaron la notación polaca inversa o RPN.
2.3. Máquinas de escribir y de procesamiento de texto
Es importante dejar sentada la aclaración de que las máquinas de escribir, al menos en sus comienzos, eran artefactos puramente mecánicos. Sin embargo vale la pena hacer una breve reseña de su historia en el país, ya que la posterior aparición de las computadoras personales está vinculada con las máquinas de escribir en dos puntos. Primero, las computadoras personales tuvieron desde sus comienzos programas para procesamiento de texto, estableciéndose por tanto como claros competidores de las máquinas de escribir. Segundo, las computadoras personales utilizaron el patrón de teclado QWERTY de las máquinas de escribir, en un intento de continuar con algo ya conocido y no generar rechazo ante algo nuevo.1
Una de las marcas más difundidas de máquinas de escribir en el país era sin duda la italiana Olivetti, fundada por Camillo Olivetti en 1908. En 1932, Olivetti abrió una filial en la Argentina para la venta de sus productos y, hacia 1951, debido al contexto internacional de postguerra, concibió la idea de construir una fábrica en territorio argentino.
En 1961 se construyó una fábrica de 32.000 m2 en Merlo, provincia de Buenos Aires. Fue considerada una fábrica modelo en aquella época debido a que contaba con comedores, biblioteca, enfermería, jardín de infantes y campos de deportes. Trabajaron allí 2000 personas y otras tantas conformaban una red de 130 concesionarios a lo largo y ancho del país. Cada ciudad importante tenía un vendedor Olivetti y, por supuesto, al menos un técnico (Scabuzzo, 2008B).
Este fácil acceso a una red de comercialización y soporte en todo el país produjo una expansión sin precedentes de la marca Olivetti, que podía así encontrarse en la redacción de todos los diarios, así como en oficinas públicas y comerciales, llegando también a algunos hogares.
En dicha fábrica también se produjeron máquinas de calcular manuales y eléctricas, algunas de las cuales fueron exportadas a otros países latinoamericanos. Estas últimas utilizadas en el ámbito empresarial hasta bien entrada la década de 1980, cuando fueron sustituidas por computadoras propiamente dichas.
Con el comienzo de la era moderna de la informática, la fábrica se vio obligada a cambiar sus formas de trabajo, su estructura y su organización. Sin embargo no fue suficiente. En 1979, en coincidencia con las políticas económicas de la época, Olivetti cerró su fábrica en Merlo.
2.4. El escenario hacia 1970
Es entonces que, entrando en la década de 1970, algunos hogares, especialmente aquellos de clase media profesional, contaban con máquinas de escribir. Los radiorreceptores estaban por doquier, muchos hogares argentinos contaban con televisión y las calculadoras económicas de bolsillo japonesas y nacionales se vendían a pequeñasempresas y a consumidores hogareños.
3. Primeras computadoras personales
Se utilizan como principales fuentes bibliográficas Bertolo y Saucedo (2011) y Scabuzzo (2008A) para esta sección.
3.1. El Telematch de Panoramic
En el año 1973 apareció en el mercado argentino el juego de video Telematch de la firma Panoramic (Winter, 2008). Se trataba de un clon del Odyssey 1 de Magnavox, el cual es conocido por ser el primer sistema de entretenimiento hogareño de este tipo.2
Una carcasa en forma de maletín de plástico contenía dos controladores y un selector de cinco botones. Cada botón seleccionaba un juego, entre los cuales había una versión del famoso Pong, un primitivo tenis bidimensional que hizo furor en aquella época. Otras de las opciones de juegos eran un frontón (variación del Pong para un solo jugador), voley y fútbol.
Es interesante notar que dicho sistema de juegos hogareño no contaba con un procesador, sino que se trataba de pura circuitería electrónica, mientras que el selector de cinco botones ejercía un switch físico que elegía cuál de los circuitos utilizar. Estaba lejos de ser de propósito general y, mucho menos, programable.
Otro dato de interés es que la consola local Telematch se comenzó a vender en la Argentina un año antes de que la Odyssey llegara a mercados internacionales, como por ejemplo Japón.
3.2. Primeras computadoras fabricadas en el país: las Czewerny
La firma cordobesa Microsistemas fue pionera en presentar, en 1975, un modelo de computadora con disquetera y monitor incorporado (Scabuzzo, 2008A). Lamentablemente no es posible precisar más detalles sobre dicho modelo o su éxito comercial a pesar de los esfuerzos del autor por encontrar mayor información al respecto.
No fue sino hasta el fin del proceso militar 1976-1983 que la industria electrónica nacional resurgió. La ya mencionada firma Czerweny comenzó a distribuir en 1982 una serie de clones de la Timex Sinclair 1000, unas computadoras personales con 2KB de memoria. Contaba con salida PAL-N y debía utilizarse el televisor como salida. Esto demostró ser una exitosa estrategia ya que se aprovechaba la amplia difusión que tenían los televisores en los hogares (y la aparición el mercado argentino de los primeros televisores en color) para reducir el costo de comercialización. Los juegos y aplicaciones, por su parte, eran provistos por la misma Czerweny, de forma muy económica, en casetes.
Estas primeras Czerweny eran fabricadas en Portugal, con lo cual aún en 1982 no es posible hablar de fabricación nacional de computadoras. Sin embargo, ya en 1984 comenzaron a producirse computadoras marca Czewerny en la planta que la firma tenía en Paraná, Entre Ríos. Los circuitos impresos, carcasas, fuentes de alimentación y cables eran producidos allí o adquiridos a proveedores locales.
La producción continuó luego con algunos modelos más poderosos, como por ejemplo la Czerweny Spectrum Plus (clon de la Sinclair Spectrum Plus), aunque con poco éxito comercial, porque la superior Commodore 128 ya se conseguía a mejor precio.
Mientras tanto, otros modelos se seguían importando desde Portugal, especialmente aquéllos que no podían competir en el mercado norteamericano. La división electrónica de Czerweny cerró en 1990 tras un grave incendio de su planta en Paraná. Sin embargo, ya por aquella época es de sospechar que la producción de la firma tenía sus días contados debido a las políticas neoliberales y, aún con mayor fuerza, a la incompatibilidad de sus productos con la PC de IBM.
3.3. Siguiendo el ejemplo: la Talent de Telemática
A partir de 1984 otras empresas nacionales comenzaron a seguir los pasos de Czewerny, siendoTelemática un caso saliente. Esta empresa, radicada en San Luis, se volcó a la importación y fabricación de modelos basados en la norma MSX ó Microsoft Super eXtended, una norma creada en 1983 para dar ciertas garantías de interoperabilidad a periféricos y software entre computadoras hogareñas de fabricantes tales como Goldstar Philips, entre muchos otros.
La computadora de norma MSX más extendida en el mercado argentino fue la Talent DPC-200, un diseño original de la coreana Daewoo que era ensamblada, a razón de 2000 unidades por mes, en la planta de San Luis de Telemática. Esta computadora de 64 KB de memoria RAM se conectaba a televisores, pudiendo ofrecer aplicaciones como juegos en 16 colores y sonido de tres canales. Gracias a su soporte de BASIC y a su amplia gama de aplicaciones fue muy exitosa en escuelas de nivel primario y secundario. Este parece ser el primer registro de la aparición de computadoras personales en instituciones educativas preuniversitarias en Argentina.
Siguiendo el éxito de la DPC-200, Telemática comenzó rápidamente a fabricar localmente circuitos impresos, fuentes de alimentación y otros periféricos.
3.4. Un clásico de los 80: la Commodore
También en 1984 la empresa Drean, relacionada comúnmente con la producción de lavarropas, negoció con la compañía norteamericana Commodore una licencia para la producción local de sus computadoras. Se trataba de la primera licencia que Commodore entregaba a tal fin, ya que en todo el resto del mundo sus productos eran importados directamente desde la casa matriz. Drean se dedicó entonces a importar las placas madre desde Estados Unidos y a ensamblar la carcasa y los periféricos en su planta de San Luis, previa adaptación del sistema de salida a la norma local PAL-N y los transformadores a 220V.3
Hacia fines de 1985 ya se comenzaron a comercializar las Drean Commodore-16 de 16 KB de RAM, 121 colores y 2 bandas de sonido. No tuvieron gran éxito puesto que en aquel entonces podían conseguirse ya las Commodore-64 importadas, de muchas mejores prestaciones. Tuvieron, sin embargo, aceptación en el mercado educativo.
El siguiente modelo fue el Drean Commodore-64, el cual tuvo una difusión masiva gracias a que se comercializaba en locales de electrodomésticos, con facilidades de pago, exactamente iguales que los lavarropas Drean. A pesar de ser más económicas que la versión importada, algunos igual preferían a esta última por considerar que tenía mejores terminaciones. En efecto, el armazón metálico que hacía de disipador de temperatura era reemplazado en los modelos locales por un armazón de cartón metalizado.
Drean llegó a producir a razón de 10.000 unidades mensuales a mediados de 1986. Sin embargo, con la aparición de la Commodore-128Drean prefirió dedicarse a importar y distribuir localmente, relegando su planta local a la mera tarea de realizar la adaptación de voltajes y normas.
Con la rápida expansión de las computadoras personales de IBM, y particularmente ante el aluvión de clones provenientes de Asia, Drean no llegó a importar la línea de computadoras Commodore Amiga. En cambio, se vio relegada en el mercado y se dedicó a la producción de monitores por unos años más hasta que cerró su división informática.
A pesar de su corta vida, la división informática de Drean logró que el nombre Commodore sea en Argentina sinónimo de computadora de dicha época. No puede decirse lo mismo de otras marcas tales como Talent o Czewerny.
3.5. ¿Producción local o desfalco? El caso Atari
Casi entrando en la nueva década, en 1987 arribó la marca Atari a la Argentina. La firma que importaba estas computadoras era la local SkyData, aunque la empresa argumentabaque las fabricaba en San Luis.4
Esta mentira no era únicamente para capturar el segmento del mercado que prefiere "comprar nacional". Se trataba de una estafa al Estado nacional argentino que, mediante sus leyes de promoción industrial, otorgaba subsidios a aquellas empresas que se empeñaran en fabricar artefactos electrónicos en el país.
Las Atari contaron con una difusión amplia en el mercado argentino; sin embargo, el arribo tardío de la marca sumado a la falta de nuevas características hizo que su presencia en el mercado local fuera menor a la de Commodore.
La excepción es quizás en el ámbito de la música, en donde Atari tuvo sus fieles adeptos, producto del puerto MIDI que venía incorporado de fábrica.
3.6. La alternativa profesional: las Apple
Por último, es necesario destacar la presencia en el mercado argentino de las computadoras de la empresa norteamericana Apple. En la Argentina, éstas se destacaron en el área profesional, siendo la Apple II relativamente difundida en el ámbito de profesionales independientes, medianas empresas y algunos exclusivos ámbitos educativos.
Algunos clones de las Apple llegaron también al país a mediados de la década de 1980.La local Control Computers se dedicó a importar clones Apple de la japonesa Taxan y comercializarlas bajo el propio nombre de la empresa. También se llegaron a difundir las chinas Vtech Laser 128.
3.7. Fin de una época
El éxito de las computadoras hogareñas en la década de 1980 generó una floreciente industria nacional vinculada a la adaptación y fabricación de productos electrónicos.
Las leyes de promoción industrial, particularmente atractivas en la provincia de San Luis, permitieron el desarrollo de estas tecnologías, así como su difusión a costos menores que si se hubiera tratado de productos importados.
Finalmente, ya a fines de la década de 1980 y comienzos de la década siguiente las empresas argentinas se dedicaron casi exclusivamente a la importación y representación local de las grandes marcas de hardware. Este proceso obedece a dos grandes motivos:
1. La legislación de promoción industrial, así como las barreras aduaneras, quedaron virtualmente liquidadas al comenzar la presidencia de Menem en 1989.
2. La producción de hardware se trasladó de Estados Unidos a Asia, lo cual conllevó una gran reducción de los costos de producción y comercialización.
A partir de este punto y hasta el día de hoy no ha vuelto a existir en la Argentina una industria de tecnología electrónica tan desarrollada como la de ese entonces. Es cierto que hay notables excepciones, como la fabricación de memorias RAM de la marca local Novatech (Novatech, 2006), pero estas son tan sólo excepciones.
4. La llegada de la PC
Las referencias bibliográficas utilizadas en esta sección son mayoritariamente Reimer (2005), IBM (1981) y Bertolo y Saucedo (2011).
4.1. El proyecto Chess: nace la PC
A fines de la década de 1970 Apple, Atari Commodore lideraban el mercado de las computadoras pequeñas. IBM veía desde afuera la competición en tal segmento, ya que su computadora más barata costaba 20.000 dólares de aquella época y estaba dirigida a institutos científicos o medianas empresas.
En un radical cambio de rumbo de política empresarial, IBM crea el proyecto Chess, un grupo de 12 personas dirigidas por el ingeniero Don Estridge. El objetivo de este proyecto era diseñar rápidamente un modelo que le permitiera a IBM ingresar en el segmento hogareño del mercado que se estaba perdiendo, y al cual estaba llegando con años de retraso.
Para facilitar y acelerar el rápido progreso del proyecto Chess se establecieron vínculos con otras empresas para que proveyeran componentes esenciales de la arquitectura. Así es como se decidió por utilizar el procesador Intel 8088, el sistema operativo DOS de  Microsoft y una impresora Epson.
En Estados Unidos, la primera PC fue ofrecida al público en 1981 a un precio de 1.500 dólares de la época. Se trataba de una computadora de 16 bits con un procesador de 5 MHz, 16 KB de memoria RAM (expandibles hasta 256 KB) y una disquetera para discos de 160 KB. La salida era a través de un monitor color de venta opcional o un televisor.
En el mercado hogareño esta computadora no tuvo el éxito esperado ya que por aquel entonces se conseguían computadoras de 8 bits a mejor precio. Una explicación del fracaso en este mercado es que a los usuarios les preocupaba la compatibilidad de los programas y dispositivos que ya tenían adquiridos más que las mejores prestaciones o un salto hacia una arquitectura de 16 bits.
No existen referencias de que por aquella época hubieran llegado las PCs de IBM al mercado hogareño argentino. Hay que tener en cuenta que en la Argentina recién comenzaban a importarse y ensamblarse las primeras Czewerny y aún casi no s conseguían las Commodore ni las Atari. Es de esperar que esto haya sido así considerando que el mercado hogareño norteamericano, de mayor poder adquisitivo que el argentino y sin pagar tasas aduaneras ni de transporte, tenía a la PC prácticamente fuera de su escala adquisitiva.
4.2. Los primeros clones
Un aspecto crucial para entender la historia de la PC y su increíble expansión como estándar es que IBM no firmó acuerdos de exclusividad con ninguna de las empresas que le proveyeron hardware y software. Más aún, para alentar la aparición de nuevos dispositivos de otros fabricantes a bajo costo, IBM decidió hacer que la arquitectura de la PC fuera un estándar abierto, con excepción del sistema BIOS (Basic Input Output System), el cual se mantuvo bajo secreto comercial.
La empresa norteamericana Columbia Data Products se embarcó entonces en la construcción de una computadora que fuera compatible con la PC de IBM. Estableció acuerdos comerciales con Intel, Microsofty todos los proveedores de IBM. Su único problema era que para tener compatibilidad necesitaba un sistema BIOS como el de IBM,al cual no tenía acceso. Para solucionar este problema se embarcó en una técnica de ingeniería inversa denominada clean room.5
Columbia Data Products lanzó su modelo de computadora IBM PC Compatible a fines de 1982, lo cual indica que el proceso de clonación le tomó poco tiempo más que un año.
En el mercado local llegaron hacia 1984 modelos como la Tandy 1000 de 256 KB de memoria RAM, o las japonesas Panasonic Sr Partner y Sanyo MBC 550. Hay que tener en cuenta que estas computadoras aún debían competir con las Drean Commodore, de bajísimo costo en comparación. La necesidad de comprar además un monitor las hacía particularmente poco atractivas para el mercado hogareño, aunque poco a poco fueron apareciendo en las empresas locales.
4.3. IBM pierde mercado
A partir de 1987, las PC compatibles (incluyendo PCs de IBM y clones) dominaban el mercado hogareño y comercial de computadoras pequeñas. Más atrás en ventas estaban las Macintosh de Apple, lasCommodore de 8 bits y las Commodore Amiga con su increíble arquitectura de 32 bits que tenía su mercado en el mundo de la producción de video.
A comienzos de la siguiente década, IBM perdió el liderazgo del mercado a manos de los vendedores de clones. Algunos hitos que marcaron este hecho son:
. En 1982, Compaq introdujo la primera computadora compatible con la PC, que era portátil. IBM no lanzó un producto similar sino hasta 1985.
. En 1986, Compaq lanzó al mercado la primera IBM PC compatible de 32 bits, basándose en el chip 80386 de Intel.
. En 1987, IBM lanzó su línea de computadoras de segunda generación: la PS/2. Esta no tenía compatibilidad con las anteriores PCs en cuanto a algunos de sus componentes y arquitectura.
Finalmente, hacia 1989, una computadora Dell compatible con la PC de IBM costaba menos de 1.000 dólares de aquella época, la mitad que una IBM PS/2.
5. Expansión: 1990-presente
5.1. 1990-1995: consolidación de las PC compatibles
En coincidencia con el fortalecimiento de las políticas neoliberales del gobierno de Carlos Menem, hacia 1990 las pocas empresas que producían computadoras y periféricos en el país se vieron obligadas a cerrar sus divisiones de informática o a redirigirlas a mercados muy específicos. Es así como las Drean Commodore, las Talent de Telemática y las Czewerny empezaron a desaparecer de las góndolas de casas de electrodomésticos.
Por esta misma época, las computadoras del tipo IBM PC compatible se establecían como la norma tanto en las oficinas como en los hogares. La producción de clones en Asia y su consiguiente bajo costo, junto con el hecho de que una arquitectura abierta generaba una floreciente competencia, hizo que por esta época los precios bajaran drásticamente.
En el mercado argentino aparecieron rápidamente empresas que se dedicaban exclusivamente a la importación y venta mayorista de clones IBM PC y sus periféricos. A la par surgieron decenas de comercios de venta minorista ubicados en cada ciudad grande y mediana. Estos establecimientos solían ofrecer servicio técnico, garantía y asesoramiento a los compradores, pudiendo de esta forma acercarse a un mercado primerizo. Se produjo un efecto similar al de las máquinas de escribir Olivetti y sus  revendedores y técnicos menos de 40 años antes.
El diario local Clarín incluía los días miércoles una sección dedicada especialmente a la venta de equipamiento informático. El dólar fijado por la ley de convertibilidad sumado a la competencia entre fabricantes hacía que no fuera extraño encontrarse con que el precio  de un mismo artículo tuviera reducciones de un 5% o 10% entre una edición y la siguiente.
5.2. 1995-2000: la llegada de Internet al hogar
En mayo de 1995 se lanzaron al mercado las primeras conexiones comerciales a Internet  (Montenegro, 2001). Al primer año de operaciones, la Argentina tenía sólo 80.000 usuarios y 300 empresas conectados a la red. Más aún, aproximadamente un 70% de los usuarios accedían a Internet gracias a conexiones académicas o gubernamentales (Chaumeil, 1999), las cuales habían ido apareciendo desde 1987. Esto era natural, ya que un abono a la red podía costar tanto como 100 pesos argentinos de aquella época (100 dólares de aquel entonces), a lo cual había que sumarle el costo telefónico.
A comienzos de 1996, Interactive ISP del grupo Multicanal, lanzó un servicio con tarifa de 50 pesos argentinos. Poco después, en 1997, Ciudad Digital (luego Ciudad Internet) del grupo Clarín subió la apuesta al lanzar al mercado su servicio a 30 pesos argentinos.  A fines de 1998 había en la Argentina 230.000 usuarios con acceso a Internet, y el porcentaje de aquellos que accedían a través de redes universitarias y del gobierno era menor al 50 %.
El año 1998 fue también importante gracias a la llegada del sistema 0-610, el cual ofrecía tarifas telefónicas especiales para usuarios de Internet. A partir de allí el crecimiento de usuarios de Internet fue espectacular: 510.000 usuarios en 1999 y 2.500.000 a fines de 2000. Los abonos ya estaban a un precio de 10 pesos argentinos mensuales (el equivalente a 10 dólares de la época, es decir 10 veces menos que 3 años antes).
Por supuesto que el acceso de menos de 3 millones de usuarios a la gran red estaba por debajo del 10% de la población de aquel entonces. Era todavía mucho menor a la proporción de 20% de la población conectada a la red en los países desarrollados.
5.3. 2000-presente: movilidad
Es complicado analizar procesos históricos en general, ya que a veces no se cuenta con bibliografía suficiente. Es difícil no tomar partido por uno u otro bando involucrado en alguna disputa o lo remoto de los hechos dificulta su comprensión. No es más fácil analizar procesos cercanos o aún en marcha; por ende, en esta sección se vuelcan más opiniones personales que en las anteriores.
La primera década del siglo XXI acercó a la Argentina a dos revoluciones digitales muy importantes. La primera de ellas es la computadora portátil, también conocida como notebook o laptop. Ya hacia 1985 IBM había lanzado al mercado su modelo PC Convertible, una portátil de 6 kg que se vendía a 2000 dólares de aquella época.
La tecnología fue de a poco permitiendo que estos artefactos fueran cada vez más livianos, más funcionales y más baratos. Sin embargo, no fue sino hasta bien entrada la década de 1990 que las computadoras portátiles dejaron de ser algo que se veía únicamente en películas.
Está claro que la computación hogareña en la Argentina no abarca a la totalidad de la sociedad, sino que puede encontrarse desde los sectores medios y medios/bajos hacia arriba. También es cierto que el costo de una computadora portátil sigue siendo superior al de una computadora personal de escritorio. Probablemente esto sea así por bastante tiempo más, ya que una portátil tiene el costo adicional de la miniaturización extrema de sus componentes, sumado al costo de la batería y al hecho de que en gran medida se comercializan modelos de marcas reconocidas.
A pesar de estas consideraciones, las computadoras portátiles se vendían en 2006 a razón de 300 por día en el mercado argentino (Infobae, 2006), el doble que el año anterior. Mientras, las computadoras de escritorio mantuvieron estable su nivel de ventas entre dichos períodos. A esto se le suma el hecho de que en territorio argentino se comenzaron a ensamblar notebooks de marca BGH y Bangho.
La segunda revolución digital que creo relevante es la telefonía móvil. En 1989, la empresa CRM-Movicomganó la licencia para prestar el servicio de radiocomunicaciones  móviles en la Ciudad de Buenos Aires, el Gran Buenos Aires y La Plata (Cámara de Informática y Comunicaciones de la República Argentina, 2007). Los móviles de aquel entonces se instalaban en automóviles o maletines. Poco después salió a la venta el Motorola DynaTAC 8000X, un dispositivo móvil pesado y poco estético que recibió el apelativo de "ladrillo". Hacia 1995 se inició la meta de cubrir el territorio nacional completo, al tiempo que ya había cuatro operadoras. Si bien no todas las empresas tenían licencia de operar en todo el territorio, hubo una cierta competencia que permitió una baja del costo para los usuarios.
Sin embargo, lo que realmente favoreció la masificación de la telefonía móvil fue la miniaturización de los componentes digitales y el gran avance en tecnología para baterías que se dio durante la década de 1990. Los equipos de telefonía móvil de hoy cuentan con un interesante poder de cómputo y tienen prestaciones mucho mejores que las computadoras personales de hace tan sólo 10 años, todo a un precio muy accesible. En el año 2003, un teléfono móvil podía conseguirse a 200 pesos argentinos (unos 65 dólares de aquel entonces), mientras que hoy se consiguen por la mitad de ese precio. El grado de penetración de la telefonía móvil en la población es de 95 equipos por cada 100 habitantes argentinos (Investigaciones Económicas Sectoriales, 2010), según datos de 2010.
Considero que puede trazarse una analogía entre la masificación de la radio gracias a la tecnología de transistores y esta masificación actual de los teléfonos móviles. En aquel entonces, el acceso universal a la radio generó el acceso a información actualizada y entretenimiento para grandes sectores de la población. Esta revolución de la telefonía móvil y su gran presencia en la sociedad significa el ingreso al mundo de la computación para mucha gente.
Es cierto que se puede argumentar que los teléfonos que compran los sectores más postergados de la sociedad no son los de mejores prestaciones. También puede decirse que la mayoría de los usuarios no aprovechan todas las capacidades de estos teléfonos tan polifacéticos. Sin embargo, aplicaciones tan difundidas como el envío de mensajes son equiparables a sistemas de correo electrónico y hay juegos de video que vienen de fábrica en casi todos los modelos. Este acceso a la tecnología móvil genera un cierto grado de "alfabetización digital" en un sector de la población que le permitiría, en caso en algún momento pueda contar con acceso a computadoras personales, tener algunos  conocimientos básicos preadquiridos.
6. Conclusiones
En este trabajo se ha presentado un breve repaso de la historia y el impacto en la Argentina de la tecnología digital hogareña. Se discutió brevemente la aparición y masiva difusión de la radio, con la sucesiva irrupción de la televisión; se comentó sobre las máquinas de escribir y los intentos de fabricarlas en Argentina; adicionalmente, se elaboró un resumen de la computación hogareña desde los primeros dispositivos no programables, en forma de video juegos, hasta las modernas PCs de escritorio y portátiles; finalmente, se estudia brevemente el impacto del acceso hogareño a Internet y la masificación de los dispositivos basados en tecnologías móviles en Argentina.
Notas
1 Es interesante notar que el patrón de teclado QWERTY fue diseñado especialmente para que los mecanismos de las máquinas de escribir no se traben. La aparición de dispositivos de entrada electrónicos podría haber generado la masificación de un nuevo patrón optimizado para la velocidad de tipeo; sin embargo,esto no sucedió.
2 El término "clon" se utiliza en este artículo para referirse a artefactos electrónicos que son diseñados y que son diseñados y manufacturados con o sin permiso, para comportarse como otro, denominado "original".
3 Existen algunas referencias, en forma de rumores, de que las placas madre importadas por Drean eran productos que habían sido comercializados con defectos, devueltos por los clientes y  posteriormente reacondicionados en Estados Unidos.
4 El lector puede consultar Bertolo y Saucedo (2011), en donde encontrará material fotográfico que prueba esta afirmación. Las computadoras Atari de SkyData tienen un precinto de seguridad que una vez violado permitía retirar la carcasa y comprobar que la placa madre tiene la leyenda "MADE IN TAIWAN" (Fabricado en Taiwan, en inglés). Cabe aclarar que esta empresa no guarda ninguna relación alguna con su homónima panameña, dedicada al diseño, instalación, integración, ventas y servicios de redes de telecomunicaciones.
5 Esta técnica se basa en el principio de que un desarrollo independiente no viola las leyes de copyright.
Bibliografía
1 BERTOLO, M. A. y SAUCEDO, R. (2011): CompuClásico: antigüedades digitales, en http://www.compuclasico.com, consultado en enero de 2011.         [ Links ]
2 BUERO, L. (1997): Historia de la televisión argentina, Buenos Aires, Universidad de Morón.         [ Links ]
3 CAMARA DE INFORMATICA Y COMUNICACIONES DE LA REPUBLICA ARGENTINA (2007): Breve historia de la telefonía móvil en la Argentina, en http://www.cicomra.org.ar/cicomra2/informes_especiales/telefonia_movil/historia_argentina.asp,  consultado en enero de 2011.         [ Links ]
4 CHAUMEIL, T. (1999): The Internet in Argentina: study and analysis of government policy, enhttp://www.isoc.org/oti/archives/index1999.html, consultado en enero de 2011.         [ Links ]
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6 INFOBAE (2006): Se venden 300 notebooks por día en la Argentina, en http://www.infobae.com/notas/nota.php?Idx=274519&IdxSeccion=100921, consultado en enero de 2011.         [ Links ]
7 INVESTIGACIONES ECONOMICAS SECTORIALES (2010): Telefónica celular móvil, en http://www.iesonline.com.ar/?accion=noticias&accion2=mas&id=33, consultado en enero de 2011.         [ Links ]
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Historia de la Tecnología pampeana aplicada al agro


Historia El proceso tecnológico puede dividirse en tres etapas: 1870-1920, 1920-1940 y 1940 enadelante.


"El número de cosechadoras evolucionó de 2.500 en 1908, a 8.400 en 1914 y
40.800 en 1937"46
Cuando Flichman señala esta evolución del parque de cosechadoras, no hace otra cosa que
observar el desarrollo de la tecnología en forma desagregada, sin verla en su conjunto y sin
distinguir los procesos globales que las enmarcan. A diferencia de esto, cuando se mira de cerca
la historia, se pueden detectar al menos tres etapas de incorporación de tecnología: 1. La etapa de
creación de una agricultura agroexportadora (1870-1920); 2) la de renovación tecnológica, entre
1920 y 1940; 3) la que, desde el fin de la Segunda Guerra Mundial, constituye una
profundización de la anterior.
1) Una agricultura moderna: Ya hemos aludido a los componentes técnicos de esta etapa. En
general, o se ha olvidado que la técnica agrícola de este período era "tecnología de punta" y se la
presentado por..., Compañía Sudamericana de Billetes de Banco, Bs. As., 1904, p. 502-4
46Flichman, op. cit. p. 98
Sartelli, Eduardo: Del asombro al desencanto: La tecnología rural y los vaivenes de la agricultura
pampeana, en: Andrea Reguera y Mónica Bjerg (comp.): Sin estereotipos ni mitificaciones.
Problemas, métodos y fuentes de la historia agraria , IHES, Tandil, 1995. Reedición electrónica
ha tildado, impropiamente, de "tradicional", o bien, se ha tendido a menospreciar la importancia
de tal tecnología en el contexto pampeano. Es necesario repetirlo: la agricultura pampeana "nace
extensiva y mecanizada"47 y no podía ser de otra manera. El desarrollo de la agricultura
pampeana habría sido imposible de otra manera. Arados, sembradoras, segadoras y trilladoras
fueron su arsenal técnico indispensable. Esta tecnología presidió toda la edad de oro de la
agricultura pampeana hasta que la competencia mundial forzó a una disminución general de
costos.
La tecnología de este período evoluciona rápidamente, perfeccionando cada uno de sus
componentes, pero no sale del esquema establecido por la relación segadora (o espigadora) y
trilladora, tracción animal, transporte por bolsa y carro. Por 50 años, entre 1870 y 1920 este
esquema dará sus frutos y permitirá la expansión de la frontera, la producción de cereal a bajo
costo y la conquista de mercados.
2. La renovación tecnológica: Esta etapa ha pasado por completo desapercibida, salvo para unos
pocos. Y aún estos suelen minimizar la globalidad del proceso. Lo cierto es que, a partir de fines
de la Primera Guerra Mundial, la cosechadora triguera, el camión, la aplicación de la
cosechadora al lino, el sistema de elevadores de campaña, la cosechadora de papas, el tractor, las
cintas transportadoras, los apiladores, etc. marcan una renovación casi completa de la tecnología
rural. La cosechadora triguera aparece a comienzos de siglo y sigue la siguiente evolución:
Cuadro 1
Años Cantidad Cantidad Cantidad
1908 2.500 2.500 1.250 1914 8.444 3.377 1.689
1927 21.755 21.755 21.755
1937 40.414 40.414 40.414
(Fuentes: Censos Nacionales, Anuario de Comercio Exterior y Conti, M.: Lo que deben conocer
nuestros agricultores sobre la cosecha del trigo. Por el profesor... Boletín nro. 2 de UBA, Fac. de
Agric. y Veterinaria, Bs. As., 1929, p. 46)
La cifra de 1914 parecería contradecir nuestra afirmación de que la principal etapa en la
47La cita pertenece a Barañao, Teófilo, citado por Tort, María Isabel, op. cit., p. 7
Sartelli, Eduardo: Del asombro al desencanto: La tecnología rural y los vaivenes de la agricultura
pampeana, en: Andrea Reguera y Mónica Bjerg (comp.): Sin estereotipos ni mitificaciones.
Problemas, métodos y fuentes de la historia agraria , IHES, Tandil, 1995. Reedición electrónica
introducción de la cosechadora comienza en 1920. Sin embargo, es necesario hacer algunas
precisiones. En primer lugar, hay dudas sobre la veracidad de la cantidad de cosechadoras de
1914: si se suman las máquinas importadas entre 1909 y 1914 al Censo de 1908, se obtiene la
cifra que vemos en la segunda columna (3.377). Salvo que se trate de un caso de contrabando
masivo, no hay base para sostener que en fecha del Tercer Censo Nacional hubiera tal cantidad
de máquinas. La confusión bastante común entre la segadora y la cosechadora (ya que a la
primera solía llamársela también cosechadora e inclusive alguien tan informado como Scobie las
confunde) inducen a creer en una estimación baja.48
Aún con las salvedades realizadas, las cantidades de ambos censos (1908 y 1914) resultan
sobredimensionadas al compararlas con las otras dos: las cosechadoras que se computan en los
primeros censos y las que aparecen en los Anuarios del Comercio Exterior luego de la guerra, no
son las mismas. Cuando, en 1919, Conti repasa el tipo de cosechadoras existentes, las clasifica en
de peine y de cuchilla. Las de peine son más antiguas y numerosas, con 5 y 6 pies de tamaño de
peine, arrancan las espigas con un mínimo de paja, trillando y limpiando el producto
satisfactoriamente cuando el trigo está en condiciones. Entre estas máquinas figuran la
Australiana, la Golondrina, la Crescent, la Complete Harvester, etc. Las de cuchilla permiten
cosechar productos algo desparejos, reducen pérdidas, y hacen mejor trabajo, con 9 pies de
ancho de cuchilla y cilindro tipo trilladora (Mc Cormick, Deering, etc.). Son máquinas más
pesadas que requieren 10 a 11 caballos en el tiro, pero algunos las transforman en automóviles,
acoplándoles un motor a nafta.49 Entonces, contando tamaños respectivos de peine y cuchilla
como índice de productividad, las cifras reales deberían ser las que aparecen en la tercera
columna del mismo cuadro. Allí queda claramente expresada la diferencia: la verdadera
incorporación masiva de cosechadoras se da después de 1914 y, si se atiende al Cuadro 2, se
notará que el proceso toma vuelo recién a partir de 1920.
48Datos del Ministerio de Agricultura confirman esta apreciación: en 1917 sólo se computaban unas 1950
cosechadoras en toda la pampa. Ministerio de Agricultura, Estadística agrícola. Año agrícola 1917-18, Bs. As., 1920,
p. 69
49Conti, Marcelo: Informe relativo a los ensayos de una cosechadora automovil realizados en el campo de la
Facultad de Agricultura y Veterinaria de Bs. As. por el profesor..., Bs. As., 1919. Según Domingo Borea, la
cosechadora de peine pierde 60 kg. de cereal por ha. cosechada. Véase La cosecha del trigo en la República
Argentina. Método para determinar su costo, Bs. As., 1921, p. 25. Anotemos, de paso, que Borea, igual que Ferré
(Máquinas para la cosecha de cereales, Bs. As., 1917), aceptan la cantidad de cosechadoras del Censo de 1914 de la
que nosotros dudamos.
Sartelli, Eduardo: Del asombro al desencanto: La tecnología rural y los vaivenes de la agricultura
pampeana, en: Andrea Reguera y Mónica Bjerg (comp.): Sin estereotipos ni mitificaciones.
Problemas, métodos y fuentes de la historia agraria , IHES, Tandil, 1995. Reedición electrónica
Cuadro 2
Años Cant. x año Años Cant. x año
1909-13 877 1922 693
1914 1 1923 2.752 1915 276 1924 7.712
1916 s/datos 1925 1.352
1917 s/datos 1926 4.565
1918 - 1927 5.033
1919 371 1928 2.079
1920 797 1929 4.965 1921 1.512 1930 2.011
(Fuente: Anuario de Comercio exterior. Las cifras de 1928 y 1929 debieron ser estimadas a partir
del peso de las máquinas ya que el Anuario de ese año no especifica las unidades importadas
sino el peso total de las mismas)
Un proceso similar viven los camiones:
Importación de automotores
Año Automóviles Camiones Total
1919 4.513 81 4.594
1920 13.499 439 13.938
1921 9.319 424 9.743
1922 15.463 516 15.979
1923 26.455 3.569 30.024
1924 32.102 5.811 37.913
1925 55.798 8.900 64.698
1926 45.643 8.789 54.432
1927 40.023 12.858 52.881 1928 53.063 20.008
73.071
1929 68.859 21.537 90.396
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pampeana, en: Andrea Reguera y Mónica Bjerg (comp.): Sin estereotipos ni mitificaciones.
Problemas, métodos y fuentes de la historia agraria , IHES, Tandil, 1995. Reedición electrónica
364.737 82.932 447.669
(Fuente: Asociación de importadores de automóviles, Anuario, p. 15)
Igual que sucedió con la cosechadora, el peso real del camión comienza a sentirse después de la
guerra pero especialmente a partir de 1923 cuando la importación se multiplica por 7 y crece a
grandes saltos hasta 1929. La importación llega, en un 97,12%, desde EEUU y Canadá y el resto
de países europeos.
Con el tractor sucede algo parecido, pero más hacia los `30. Si en 1907 asistimos al examen de la
"aradura a vapor", el tractor recién se expande fuertemente a partir de 1920.50
El Anuario de la Asociación de Importadores de Automotores y Afines daba las siguientes cifras:
Años Unidades
1924 811
1925 5.313
1926 2.426
1927 1.692
1928 3.238
1929 7.252
Promedio 1925-29 3.984
Total 20.732
Es difícil evaluar el impacto del tractor (al que debe sumarse el camión y el automóvil) pero,
Buenos Aires, la mayor receptora de los tres elementos mencionados y al mismo tiempo, la
provincia donde más crece el área sembrada, ve caer el volumen de su rodeo de 2.778.085 en
1920 a 2.271.458 en 1928.51 Por otro lado, es necesario tener en cuenta que las necesidades de
tracción aumentan más que el área sembrada en la medida que las nuevas cosechadoras
combinadas exigen muchos más animales que las trilladoras estacionarias y las livianas
espigadoras y segadoras atadoras. Si en 1910 Huret señalaba que un tractor podía reemplazar 64
50Nuestra tierra, 1927, p. 52
51SRA, Anales, 1930, p. 15
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Problemas, métodos y fuentes de la historia agraria , IHES, Tandil, 1995. Reedición electrónica
caballos, 20.000 tractores podrían haber desplazado a 1.280.000 animales52, suponiendo que la
potencia de la máquina no hubiera aumentado nada.
Por qué no se expande más el parque de tractores? La opinión más común es la de Carl Taylor,
según el cual la baratura del caballo conspiraba contra el "coloso de hierro".53 Ahora bien, a
despecho de esto, mientras las has. sembradas aumentan un millón más entre 1930 y 1937, las
dedicadas a equinos bajan un millón más. Es probable que la expansión del tractor haya sido más
importante de lo que creemos y que su evolución dependa más de los problemas globales de la
economía nacional que del costo de los caballos.
Por qué se produce esta renovación? La fe positivista en la virtud tonificante de la máquina
resurgió, una vez más, cuando la situación internacional posterior a la Primera Guerra Mundial
colocó a los productores argentinos frente al descenso de los márgenes de beneficio. En ese
momento, los productores locales giraron la vista a esa bolsa de rentabilidad oculta que eran los
salarios de cosecha. El problema no residía en su valor sino en su cantidad. Se podría reducir
fuertemente el costo de la cosecha de cereales si se conseguía disminuir el numero de brazos
empleados:
"La industria agrícola a la par que las demás industrias, está pasando, en todas partes, por un
período de crisis muy intensa, lo que impone intensificar la producción con el objeto de abaratar
su costo y vencer en tal forma la competencia del mercado mundial.
Por lo que se refiere a la agricultura argentina, estos problemas han sido ya planteados y creemos
que es urgente una solución rápida de los mismos debido a que la mayor parte de los productos
de su suelo son objeto de exportación y sólo podrán exportarse con ventaja mientras los precios
que nos ofrecen los mercados consumidores dejen cierto margen de utilidad para el productor.
Necesitamos entonces conseguir la máxima producción con el mínimo gasto; esto no se obtiene
confiando solo en la fertilidad de la tierra y en la bondad del clima; el agricultor debe apelar a
todos los medios que la moderna agricultura pone a su alcance para lograr ese fin y entre estos
medios tenemos el amplio y racional empleo de las máquinas mejores y más perfeccionadas."54
52Huret op. cit., p. 407
53Taylor, Carl: op. cit., p. 147
54Conti, M.: Informe relativo a los ensayos de una cosechadora automovil realizados en el campo de la Facultad de
Agricultura y Veterinaria de Bs. As. por el profesor..., Bs. As., 1919, p. 61
Sartelli, Eduardo: Del asombro al desencanto: La tecnología rural y los vaivenes de la agricultura
pampeana, en: Andrea Reguera y Mónica Bjerg (comp.): Sin estereotipos ni mitificaciones.
Problemas, métodos y fuentes de la historia agraria , IHES, Tandil, 1995. Reedición electrónica
Y la historia le daría la razón a Marcelo Conti, tal vez el más capacitado técnico en estas
cuestiones: la cosechadora de trigo era ya una realidad que explotaría con violencia durante los
años `20. A fines de los '20 cuando la crisis se mostraba como un fenómeno de larga duración,
otra vez apareció en primer plano el problema de los costos de cosechar. El instrumento elegido
fue ahora el elevador de granos. Tanto el Informe Mihura como los escritos de Duhau repiten las
virtudes reconocidas de la cosecha a granel.55 En los `30 el éxito de las innovaciones iniciadas en
los `20 provoca toda una literatura sobre las consecuencias sociales de la mecanización:
Santillán, Giribaldi, Lazarte, Boglich, Borras y Buira, percibirán, desde el movimiento obrero
cómo "cuando la ciencia se pone al servicio del capital somete siempre a razón la mano rebelde
del trabajo".56
La crisis de sobreproducción está forzando a la agricultura pampeana a redefinir su estrategia de
costos frente a la competencia internacional. La primera etapa corresponde a la de la expansión
mundial de la nueva agricultura cerealera: tierras baratas, técnicas nuevas, rentas bajas y
mercados en expansión. Hacia la Primera Guerra Mundial el proceso de inversión de capital en
todas las economías cerealeras va invirtiendo las tendencias iniciales: tierras caras, fronteras
cerradas, rentas altas y mercados en repliegue. Con altibajos, especialmente los provocados por
la guerra, la nueva tendencia comienza a reflejarse en los precios. En algunos países, como la
Argentina, la crisis social y la explosión de sindicalización rural colocan una nota de dramatismo
que acelera la toma de decisiones. Aquí y en todo el mundo la solución implica bajar costos. Y
bajar costos significa emplear aquellas técnicas que, en su contexto específico, señalan un
aumento de productividad por hombre ocupado. Con un mercado que comienza a achicarse, la
inversión de capital que aumente la productividad del trabajo aumentando simultáneamente la de
55Duhau, Luis: "Los elevadores de granos en el Canada", en: Sociedad Rural Argentina, Anales, 1928, p. 227;
Ministerio de Agricultura de la Nacion: Informe presentado a S. E. el Ministro de Agricultura Don Emilio Mihura
sobre la implantacion de un sistema general de elevadores de granos, Bs. As., 1928
56Buira, Demetrio: Dolor gaucho, Bs. As., La Vanguardia, s/f; Boglich, José: La cuestión agraria, Bs. As., 1935;
Santillán, Diego Abad de : "La reducción de la jornada de trabajo. Más sobre la evolución del proceso productivo y
sobre las causas de la desocupación." En La Protesta, suplemento quincenal, Bs. As., junio 30 de 1928, Año VII, nro.
287, pags. 358-362; Borrás, Antonio: Nuestra cuestión agraria. En defensa de la producción y del productor, Bs. As.,
Ed. La Vanguardia, 1932. La cita es de Marx.
Sartelli, Eduardo: Del asombro al desencanto: La tecnología rural y los vaivenes de la agricultura
pampeana, en: Andrea Reguera y Mónica Bjerg (comp.): Sin estereotipos ni mitificaciones.
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la tierra, es decir, vía aumento de los rendimientos, tiene dos problemas: primero, la reducción de
costos sería mínima en tanto el resto de la tecnología permanece estable; segundo, un mercado
con crecientes restricciones no estimularía a aumentos de la producción con problemas de
colocación en aumento. La solución más realista consistiría en reducir costos vía reducción de la
cantidad de trabajo necesario. Y esa fue precisamente la respuesta: camiones y cosechadoras son
las principales innovaciones de los `20. Tractores y elevadores, de los `30. Esto no impidió
aumentos en la productividad de la tierra, especialmente del trigo, en los años `30.
6. Cada etapa de incorporación de tecnología tiene profundas consecuencias sobre el conjunto
de la sociedad.
"Una vez establecido, el capitalismo agrario detiene sus propios impulsos de
crecimiento, comienza a replegarse sobre sí mismo y se resigna a reproducir en
forma simple las condiciones de producción y acumulación que le dieron origen;
crece en extensión más que en profundidad."57
Dada la importancia que tenía la agricultura en la economía nacional cualquier transformación en
ella no podía dejar de repercutir en el conjunto de la sociedad. A fines de los `70 del siglo pasado
la agricultura no existía. Cuarenta años después la sociedad era transformada radicalmente
gracias a una economía cerealera que se había abierto paso entre las primeras del mundo. Lo
primero no puede despegarse de lo segundo. La aparición de una economía de exportación de
magnitudes descomunales no puede explicarse sin una revolución técnica. Ya hemos hablado de
eso. Ahora corresponde responder a una contradicción no siempre percibida: cómo se produce
innovación tecnológica que incorpora mano de obra y aumenta los salarios. Normalmente, la
incorporación de tecnología tiene resultados opuestos. Para entenderlo es necesario distinguir el
proceso mecanizatorio argentino del británico. En Gran Bretaña, en Inglaterra más precisamente,
la tecnología agrícola moderna se expande sobre una agricultura preexistente, desplazando mano
de obra de esas labores y aumentando la explotación del proletariado rural. El Capitán Swing y
su bello gesto de gloriosa resistencia fueron su consecuencia más visible. La moderna tecnología
57Pucciarelli, Alfredo: El capitalismo agrario pampeano, 1880-1930, Hyspamerica, Bs. As., 1986
Sartelli, Eduardo: Del asombro al desencanto: La tecnología rural y los vaivenes de la agricultura
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venía aquí a reducir los costos de la cosecha "manual". En la Argentina la agricultura no existía
antes de la tecnología moderna. Al contrario, esta viene a hacerla posible: de ahí que, como
señaló Marx para el caso americano, la máquina reemplaza "virtualmente" la mano de obra.58 En
lugar de un reemplazo "real" la máquina crea puestos de trabajo con una velocidad desconocida.
Lo que se percibe inmediatamente es la poderosa presión internacional para la expansión de la
frontera. Esta combinación que se refuerza a sí misma es la clave de un proceso de revolución
tecnológica que, en lugar de expulsar, atrae mano de obra: si la máquina hace posible la
expansión, la expansión exige máquinas, las que necesitan obreros. La consecuencia
sorprendente es la tendencia a la elevación constante del salario. En esta etapa (1880-1920), se
prioriza la ocupación de espacios, la expansión de la frontera; de 1920 en adelante, para
recuperar rentabilidad, se prioriza el ahorro de salarios y brazos: la primera mecanización los
incorpora, la segunda, los disminuye y abarata.
En efecto, la profunda renovación tecnológica de los años `20 inaugura una nueva etapa de
acumulación de capital en el agro pampeano, y, dada la importancia de la agricultura en la
economía nacional, también en ella. La industrialización que nace en los `20 y se profundiza en
los `30 no puede explicarse sin este proceso, como consecuencia del cual, la renovación
tecnológica pampeana se yergue en el sostén oculto de la industrialización de los `30 y `40 y
constituye un momento necesario en la creación de la clase obrera peronista. Las famosas
migraciones internas están íntimamente relacionadas con este proceso: la primera fase de las
mismas es el rechazo por el campo de la población urbana migrante. Los más de 300.000 obreros
que siguen la cosecha del trigo, los carreros que la transportaban, los estibadores que la
conducían a hombros, todos ellos serán los primeros en ingresar a la fábrica:
""El problema de la desocupación
(...)
Por otra parte, el autor de ese comentario hecho en "Crítica" supone que el fenómeno del
industrialismo norteamericano aún no se ha manifestado aquí. Este modesto ex colono y ex
"linghera" ilustrara al mismo tiempo con algunas verdades.
Desde la trilla con yeguas, al prodigioso trabajo de la cosechadora a motor, hay un gran salto que
58Marx, Carlos: El capital, FCE, Mexico, 1986, t. I, p. 422.
Sartelli, Eduardo: Del asombro al desencanto: La tecnología rural y los vaivenes de la agricultura
pampeana, en: Andrea Reguera y Mónica Bjerg (comp.): Sin estereotipos ni mitificaciones.
Problemas, métodos y fuentes de la historia agraria , IHES, Tandil, 1995. Reedición electrónica
ha castigado duramente a millares de obreros cercándoles las tranqueras de los trigales y
condenándolos al vagabundaje. La cosechadora con tractor hace con dos hombres lo que antes se
hacía con veinte en un mes de labor. Pasa a trasto viejo la espigadora, la primitiva atadora y la
trilladora con su ejército de obreros.
En el maíz pasa otro tanto: la cosechadora se esta imponiendo y cuando en breve se perfeccione,
la fuente de recursos de 20.000 deschaladores se habrá cerrado por completo. (...)
El fenómeno del industrialismo esta latente entre nosotros la desocupación es tan permanente y
relativa como en cualquier país del mundo; aquí un camión de carga con acoplado ha desplazado
a 10 carreros, castigado de rebote a los talabarteros, herreros de caballos, etc. La barredora
mecánica, el faenamiento mecánico en mataderos y frigoríficos ha hecho sumar a los
desocupados una falange sin fin (...)"59
A lo que Giribaldi señala puede sumársele la suerte de los chacareros mismos: durante la larga
crisis que va desde la Primera Guerra Mundial a la Guerra Fría, los chacareros más pobres se
verán obligados a innovar o desaparecer: en los años `30 no se puede sobrevivir, ni como
productor familiar, si no se dispone de cosechadora, tractor y camión. Quienes no pueden hacerlo
culminan, sus hijos primero, ellos mismos después, sumándose a la "falange sin fin". A pesar de
la enorme potencia de ese texto, ya convertido (con toda justicia) en un verdadero clásico de los
estudios agrarios, al detener su análisis en la crisis del `30, el autor de El capitalismo agrario
pampeano pierde la oportunidad de observar el momento en que éste comienza una nueva etapa,
creciendo "en profundidad" y aumentando su complejidad. Así y todo, esta etapa que se inicia no
significa, como quiere Alejandro Dabat, una "notable aceleración de los procesos de
acumulación capitalista originaria",60 toda vez que no se trata de una "ruptura del complejo rural
autosuficiente", por lo menos en lo que a la pampa húmeda se refiere. Nunca hubo nada parecido
a una economía campesina en la pampa. Por el contrario, se trata de una profundización de su
desarrollo capitalista y, por ende, del capitalismo argentino en general.
59La Protesta, 14/4/28, p. 2
60Dabat, Alejandro: Crisis y reestructuración productiva en América Latina", en Cuadernos del Sur, nro. 4, 1986,
p. 76a de la